La última película sobre Rambo parece perseguir un (quizás) final digno para el personaje, al igual que en la última entrega de Rocky. Aunque con fama de actor de películas de acción descerebradas, en parte merecida, Stallone a mi parecer es un buen director. Aunque comenzó su carrera cinematográfica con un par de cameos en una película porno y una comedia de Woody Allen, su inicio serio en el medio fue como guionista. Su éxito en 1976 con Rocky, nominado por ello a los Oscar como mejor actor y guionista lo avalan y apuntaban quizás a una carrera como actor dramático muy serio, esa dirección la mantuvo dirigiendo flims como F.I.S.T. y Paradise Alley, más adelante ha continuado recibiendo buenas críticas por su actuación en Cop Land.
Pero su aspecto físico y su gusto por el cine de acción, de puro entretenimiento, muy en la onda para la Era Reagan y los beneficios en taquilla lo perdieron para la crítica más seria.
Y a quien le importa. Aunque solo quiera seguir explotando el personaje que le dio fama, Rambo IV me parece una película gore bien contada y dirigida, con incluso momentos de marcado preciosismo en la ambientación retratando ciertos paisajes.
Momentos gloriosos del cine de acción, con permiso de Chuck Norris.
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